Dormir y envejecer, todo está relacionado

A medida que envejecemos las horas de sueño se van acortando

 

Dormir y envejecer guarda una conexión clara. Las personas mayores ven reducido el tiempo de sueño de forma considerable.

Debe prestarse más atención El sueño es fundamental en cualquier etapa de la vida. Es la fábrica de nuestro día, donde nos formamos, restauramos, reparamos para así poder enfrentar en condiciones idóneas la vigilia. Podemos decir que dormimos para poder estar despiertos. Todos dormimos, mejor o peor, más horas o menos, pero sin dormir no podríamos vivir.

No todo el mundo necesita las mismas horas de sueño, y dependiendo de las edades se duerme más o menos. De pequeños es más común dormir más y a medida que se van cumpliendo años existe un descenso en el tiempo total de tiempo  y en su calidad.

En la vejez los patrones de sueño sufren modificaciones. Los ancianos pierden la capacidad de conseguir un sueño continuado, consolidado, el sueño se ve fragmentado, se despiertan con mayor frecuencia, pasan menos tiempo en la fase de sueño profundo, en especial, el sueño profundo no REM se reduce considerablemente. Se van a la cama más temprano, tardan más en dormirse y se levantan antes. Esto lo van compensando en cierta medida con frecuentes y cortas siestas a lo largo del día.

Se puede decir que los adultos pierden su capacidad de generar un sueño profundo y reparador. Además posiblemente las personas mayores pagan por el sueño perdido tanto mental como físicamente.

 

Las siestas cortas son frecuentes en la tercera edad

QUE HACE QUE DURMAMOS MENOS CON LOS AÑOS?

 

Estudios al respecto, hechos por científicos, desvelan, que existen causas, dependiendo del sexo, que vienen acompañando a la edad, como pueden ser en las mujeres los cambios hormonales que suceden a lo largo de su vida. El periodo de la menopausia marca un antes y un después en el descanso nocturno de las mujeres. En el caso de los hombres, los problemas de próstata hacen que se levante mayor número de veces a lo largo de la noche, esto trae como consecuencia más interrupciones en el sueño.

A estos elementos particulares se suman otros más comunes. Los problemas de salud, muchos más frecuentes a estas edades y la toma de medicamentos que atraen efectos secundarios que influyen en el sueño, como pueden ser la toma de diuréticos(aumenta el número de veces que se levanta a orinar) o los antidepresivos (algunos producen síndrome de piernas inquietas). También es de destacar que el dolor crónico acompaña con frecuencia a estas personas y esto imposibilita un buen descanso.

La disminución del sueño a esta edad se vincula también al declive de la melatonina, hormona que produce naturalmente nuestro cuerpo con la disminución de la luz y el aumento de la oscuridad al llegar la noche.

Existe además la hipótesis que sugiere que el deterioro del sueño con el paso del tiempo está vinculado al deterioro ocular que se produce con los años. El cristalino se amarillea a medida que envejecemos. Esta coloración impide que la luz azul llegue a la retina-la parte del ojo donde se forman las imágenes- lo cual altera la regulación del ritmo circadiano de nuestro cuerpo, que está vinculado al ciclo de sueño-vigilia.

Existe la controversia en torno a dormir y envejecer de si las personas mayores simplemente necesitan dormir menos o en cambio no logran dormir las horas que todavía siguen necesitando.

Tenemos un estudio llevado a cabo por científicos investigadores de la Universidad de California en Berkeley y publicado en la revista “Neuron”, que indagaron sobre este asunto, la relación entre dormir y envejecer.

De acuerdo con este trabajo de varios investigadores, la falta de sueño, no solo de sueño profundo en estas edades, se debe a una pérdida de conexiones neuronales en el cerebro cuyo trabajo era recoger las señales de somnolencia; por lo tanto, lo que realmente sucedería es que el cerebro no procesa correctamente la necesidad de dormir. Las neuronas con el paso del tiempo, pierden esa eficacia para detectar esa necesidad. Y aunque no existe un consenso absoluto sobre esto, se cree que el cerebro humano es incapaz de otorgar el descanso necesario debido al envejecimiento. (Walker). Es como una antena de radio débil; la señal está ahí, pero la radio no puede captarla correctamente.

Antes se solía pensar que existía relación entre dormir y envejecer, la falta de sueño era una consecuencia del envejecimiento; sin embargo este estudio plantea que la falta de sueño podría ser la causa del envejecimiento.

Asimismo, los investigadores dejan clara una cosa: la falta de sueño no se produce en la tercera edad, como se suele creer, sino que a menudo empieza a finales de los 20 o 30 años de edad, y continua de forma progresiva a medida que avanzan los años.

De hecho según Walker, a los 50 años solo se obtiene un 50% del sueño profundo que se recibía a los 20 años; a los 70 años, la mayoría de los individuos tienen poco o ningún tipo de sueño profundo de alta calidad, lo cual da lugar a despertares nocturnos y a un descanso escaso.

No existe una solución por el momento a este problema: las investigaciones sobre los receptores del sueño son pocas y los medicamentos para dormir son comunes entre las personas mayores, pero sedan el cerebro en lugar de restaurar los patrones de sueño juvenil. El declive del sueño es uno de los cambios fisiológicos más dramáticos que se producen a medida que envejecemos. La relación entre dormir y envejecer es patente. Tenemos que reconocer la contribución casual de la interrupción del sueño en el deterioro físico y mental que subyace en el envejecimiento y la demencia.

Debe prestarse más atención al diagnóstico y al tratamiento de trastornos del sueño si vamos a extender la salud y no la vida.

 

 

 

Como sobrevivir a una noche sin dormir

 

La falta de sueño no sólo afecta a nuestra vida laboral, también a nuestra salud

 

Pasaste una noche sin dormir y debes sobrevivir el resto del día sin quedarte dormido.

Pasar noches sin dormir tiene efectos perjudiciales para la salud. Bien sea por ocio, por insomnio o por alargar más las horas laborales, muchas veces hacemos del horario nocturno, el que debiera ser para dormir, un horario flexible al que echamos mano según las necesidades o gustos. Desde luego no es recomendable y debemos evitarlo y hacer que sean pocas las excepciones a la norma.

Tras una noche sin dormir, lo mejor es descansar, si esto no fuera posible y tuviéramos que cumplir con nuestro horario de trabajo  hemos recopilado unas sugerencias científicas para poder mantenerse despierto y activo tras una noche en vela.

 

Consejos Para sobrevivir a una noche sin dormir:

Levantarse cuando suene el despertado es primordial, querer recuperar las horas de sueño por la mañana no es la mejor opción. Aunque nos resulte muy difícil, debemos ponernos en pie siguiendo la rutina de todos los días. Dormir en horas que normalmente solemos estar activos perjudica el reloj interno. De esta forma al llegar la hora de acostarnos tendremos sueño y podremos recuperar el horario normal que se había visto interrumpido.

Una ducha matinal, con agua tibia, que tienda más bien a fría, estimulará nuestra circulación sanguínea y despertará los músculos,  hará que espabilemos para empezar el día tras esa noche sin dormir.

 

Una ducha tibia ayudará a combatir el sueño y cansancio

El desayuno nos ayudará a mejorar el estado de ánimo. La cafeína es un buen aliado para luchar contra el cansancio, un buen café o también un té rico en teína nos ayudará a pasar mejor la mañana. No conviene abusar tampoco, nos puede causar nerviosismo y no nos ayudará a concentrarnos.  Es conveniente evitar el azúcar, esta nos subiría el índice glucémico con rapidez, el nivel de energía se disparará para después caer empicado y podría producir más sueño. Ingerir proteínas sin embargo nos mantendrá en alerta, una buena opción sería comer huevos, carne, nueces y yogur griego. Nos darán sensación de saciedad y mantendrán la energía suficiente durante todo el día.

Hidratarse es muy importante, es recomendable beber agua o bebidas hidratantes a lo largo de todo el día. La deshidratación, aunque sea leve hará que los síntomas de la falta de sueño se manifiesten y se sienta cansancio, sueño y dificultad para concentrarse en las tareas. No beber alcohol ya que esto ayudaría a una más pronta deshidratación.

Renuévate con la luz del sol, subir persianas y correr cortinas, la luz activa el organismo. A primera hora nos dará energía para comenzar la jornada y si se puede trabajar cerca de una ventana o hacer descanso con cierta frecuencia al aire libre ayudará a combatir el sueño tras la noche sin dormir y aumentará el estado de alerta..

En el trabajo es buena idea clasificar, si pudiera ser, las tareas. Las de mayor dificultad por la mañana y las más sencillas por la tarde ya que los ritmos circadianos naturales del cuerpo están más lentos y el cansancio será más acusado.

Hacer algo de deporte por la mañana, preferentemente temprano, el ejercicio nos estimulará.

 

El deporte a primeras horas de la mañana será un aliado

Se recomienda interactuar con la gente, charlar un poco con algún compañero, 10 minutos de conversación ayudan a experimentar un aumento en las funciones cognitivas, como la atención y el pensamiento flexible. Levantarnos del puesto del trabajo, caminar un poco al aire libre, evitar la pasividad para que la somnolencia no se vaya apoderando de nosotros.

El cuerpo tiene un bajón natural a las 6 u 8 horas después de despertarse. Es muy tentador en este momento un rato de siesta, esto después de una noche sin dormir puede empeorar el estado y despertarnos peor que antes de dormirnos. En el supuesto que el cansancio sea ya agotador se puede dormitar en un lugar no muy cómodo 20 minutos o media hora como mucho, esto refrescará la mente y dará energía para terminar la jornada. Aunque también pudiera ocurrir que lejos de favorecer el rendimiento intelectual, al mejorar la alerta, la capacidad psicomotriz y disminuir la sensación subjetiva de somnolencia nos despertemos con sensación de necesitar dormir más, de encontrarnos destrozados y vencidos.

 

Las últimas horas de la jornada pueden llegar a ser agotadoras

Llegado este punto si se puede salir antes del trabajo sería lo mejor, el trabajo que podamos hacer en esas condiciones seguramente no sea el que debiera.

Estos consejos están enfocados a una noche trasnochada, no es recomendable que la falta de sueño sea la regla y no la excepción. No dormir cansa más que una maratón.

Cuando trabajamos sin haber dormido las horas necesarias nos encontramos irritable y no rendimos igual. Esto quiere decir que los tiempos de reacción aumentarán y es posible que nos olvidemos de muchas cosas. Y más importante todavía no descansar lo suficiente tiene muchas consecuencias graves para nuestra salud. Comenzar el día tras una noche sin dormir, también.

La buena noticia al acabar esta ardua jornada es que las posibilidades de pasar una buena noche de sueño reparador futura se han multiplicado.

 

Como nos afecta el cambio horario en la salud 

Claves para sobrevivir al cambio horario
Claves para sobrevivir al cambio horario
Como afecta el cambio horario en nuestras vidas

 

El debate sobre los trastornos que el cambio horario pueden producir en nuestro organismo y salud se repite cada año cuando adelantamos o atrasamos los relojes. Lo cierto es que la sociedad se pone en movimiento en función del sol. Cuando no había relojes se hacía de forma natural, ya había horarios de verano e invierno.

Si esta norma da origen a polémicas, en España resulta aún más, puesto que ni siquiera tenemos el huso horario que nos correspondería, que es el del meridiano de Greenwich, el mismo que Inglaterra o Portugal. Lo curioso es que volver al horario que nos correspondería sería muy sencillo. Bastaría con no hacer nada. Cuando los demás países adelantan el reloj en marzo para ponerlo en horario de verano, si no lo hacemos, nos equipararíamos de nuevo al horario de Greenwich. Dado que el cambio de verano resulta más perjudicial que el de invierno, adoptar nuestro uso sería un alivio para nosotros.

 

A pesar de que ya es una práctica habitual el cambio horario dos veces al año, no deja de tener implicaciones en la salud y bienestar.

 

En el cuerpo humano hay neuronas que funcionan como relojes y que mandan señales de forma periódica para establecer unos ciclos circadianos, es decir, de alrededor de un día, el más importante está en el cerebro pero existen cientos de pequeños relojes localizados en los órganos y células de nuestro cuerpo, todos controlan las funciones a nivel local, por ejemplo, hacen oscilar nuestra temperatura corporal o activan nuestro intestino. Pero aparte de varios relojes internos, el organismo cuenta con mecanismos para “poner en hora” estos relojes y ajustarlos al ambiente. Estos son, por ejemplo, la luz solar y los estímulos externos, como los horarios de las comidas, la actividad física  o los horarios de sueño.

 

¿Qué pasa entonces si a este reloj le imponemos un adelanto o retraso de una hora? ¿Afecta esto a nuestro ritmo biológico?

 

Efectivamente, el cambio de hora afecta a nuestro ritmo de sueño y como consecuencia a nuestra salud, no afecta a todas las personas por igual, sobre todo sufren estas consecuencias los ancianos y niños. En estos grupos de personas, al cambio horario su reloj biológico puede tardar en ajustarse varios días, incluso una o dos semanas.

Pueden aparecer trastornos en el sueño, cambios en los hábitos alimenticios y en el estado de ánimo que traen consigo la sensación de fatiga, cansancio, irritabilidad o falta de concentración, ansiedad.

 

trastornos de los cambios horarios
Los niños y los ancianos son más vulnerables a los cambios horarios

 

¿Qué se puede hacer para que no afecte el cambio horario?

 

El cambio de hora podemos manejarlo con unas claves para que no interfiera, o lo haga mínimamente, en nuestra  salud y bienestar:

 

  • No cambiar bruscamente la hora de acostarnos y levantarnos. Ayuda el ir haciéndolo de forma escalonada.
  • No dormir siesta para combatir el cansancio, sobre todo si no es hábito, ya el reloj interno se alterará más.

Aprovechar la luz solar para que los rayos solares aporten sus beneficios a la salud. A mayor cantidad de luz solar, mayores niveles de serotonina y mejor estado de ánimo. Cuando se hace el cambio horario de invierno anochece antes y puede que el estado de ánimo se vea afectado negativamente. La exposición a la luz natural nos ayuda a mantener también el ciclo de sueño y vigilia, ya que el nervio óptico, durante las horas de sol, envía un mensaje a la glándula que produce melatonina, una hormona asociada con la aparición del sueño. Esta glándula segrega menos cantidad de melatonina durante las horas de luz y cuando comienza a anochecer se inicia un aumento de producción por lo que se pueden descompensar los ciclos de sueño-vigilia.

 

Alteración en el reloj biológico
El cambio horario puede causar trastornos en el ciclo sueño-vigilia
  • Hacer ejercicio, aunque parezca contradictorio, hacer ejercicio nos dará energía para acabar mejor la jornada y ayudará a estabilizarnos.
  • Cenar ligero ayudará a conciliar el sueño, evitemos la cafeína y el alcohol.
  • Los alimentos ricos en triptófano (huevos, leche, chocolate, carne, pescado (atún y salmón especialmente) frutas como el plátano, legumbres y verduras como la calabaza) nos ayudaran a minimizar el insomnio.

 

Estos consejos ayudaran a una transición tranquila hacia el nuevo horario que la salud lo agradecerá. De todas formas no deja de ser un trastorno leve que no genera grandes problemas y que en pocos días normalmente se produce una adaptación.

 

Sin embargo, como las quejas por el cambio horario por parte de los ciudadanos por los efectos negativos para la salud y el sueño sobre el cambio horario cada vez se hacen notar más y dado también que los últimos estudios realizados apuntan a un ahorro mínimo de energía, la Comisión Europea ha propuesto no seguir regulando el cambio de hora y que, después del cambio a horario de verano (el último domingo de marzo de 2019) cada estado miembro elija si sigue cambiando la hora y de no hacerlo con qué hora se queda. Así que es posible que esta sea la última vez que el cambio horario de invierno.

 

La importancia del sueño para la salud y la belleza

El sueño y la belleza
El sueño y la belleza
El sueño es un gran aliado para la belleza

 

La Belleza del sueño es real. “La bella durmiente” no era bella por casualidad, el largo sueño que tuvo seguramente le aporto sus beneficios.

La fuente de la eterna juventud podemos tenerla al alcance de todos, sin duda el sueño es lo más parecido a ella. Un sueño profundo puede hacer maravillas en la cara…tanto como el aloe vera, botox, o la más sofisticada medicina ortomolecular. Ahora el bom es «clean sleeping» o «dormir«, confesado como el secreto de la belleza de muchas famosas.

La tendencia de salud más importante es «dormir limpio«.

¿Qué es esto? sencillamente cuidar la cantidad y calidad del descanso, dormir 8 horas de sueño cada noche, sin interrupciones y en profundidad.

Debemos dar al sueño la importancia que se merece y que en los últimos tiempos la estamos olvidando. El ritmo de vida que llevamos, trabajo, compromisos familiares, televisión, móviles y llega la noche y continuamos haciendo tareas que en el día no dio tiempo a terminarlas. Hemos introducido en nuestras vidas una velocidad que está generando cambios en nuestro reloj social. Somos una sociedad con déficit crónico de sueño y esto acelera el envejecimiento cutáneo.

Dormir es muy importante para el cerebro, éste necesita hacer tareas de mantenimiento, reparar daños celulares, eliminar toxinas que acumula durante el día, elevar el suministro de energía y archivar recuerdos.

Está demostrado que si pasamos varios días durmiendo poco, muchas células de nuestro cerebro mueren y esto tiene implicaciones graves.

 

Dormir embellece

Y si eso fuera poco, dormir tiene unos beneficios también para la belleza. La piel usa las horas que duerme para recuperarse de los daños sufridos durante el día. Durante el sueño la piel aumenta su oxigenación celular, la musculatura facial se beneficia de reposo y se eliminan las radicales libres, esas moléculas que activan el envejecimiento celular incluidas las de la piel.

Y es que durante el descanso nocturno las células se renuevan hasta 8 veces más rápido que durante el día.

La piel comienza la generación de un nuevo tejido. La producción de colágeno se incrementa considerablemente, siendo importante éste para mantener la resistencia y elasticidad de la piel.

Descansar bien es la mejor manera para despertar con una apariencia fresca y lozana.

Como vemos son múltiples lo beneficios del sueño para la belleza, algunos más vamos a nombrar.

  • La piel sufre menos y tiene un aspecto más claro y resplandeciente, se muestra más atractiva.
  • Los ojos lucen más brillantes y las ojeras desaparecen o se muestran menos oscuras.
  • La hormona del crecimiento tiene su mayor actividad en la noche y es la que promueve la regeneración de células en la piel. La piel digamos que con ésta actividad se cura a sí misma.
  • La piel por la noche respira más lento y profundo, oxigenándose mejor. Ésto hace que aumente la permeabilidad, es por esto que los productos cosméticos se absorben más rápido.

 

dormir bien sinónimo de belleza
Dormir bien el mejor cosmético

Nuestra piel es reflejo de nuestro mundo interior. Cuando no dormimos bien nuestra piel se torna más oscura, ojos hinchados, rasgos cansados, piel más opaca, expresión de amargura y cansancio en el rostro, esto día tras día genera más extrés y como consecuencia un envejecimiento prematuro.

Dormir más y mejor es sinónimo de una piel perfecta, sobre todo en el rostro, nos hace más atractivos, es el tratamiento de belleza más natural y económico, el sueño juega un papel tan poderoso que debe de ser una de nuestras prioridades, ya que dormir bien es «Calidad de Vida«.

¿Qué importancia tiene el colchón para dormir bien?

El colchón es fundamental para conseguir una buena calidad del sueño, en él vamos a pasar muchas horas del día y el cuerpo necesita la superficie apropiada para un descanso saludable. Pero esto ya forma parte de otro «Post» diferente.

Aromaterapia para ayudar a dormir

Aromaterapia para vencer el insomnio
Aromaterapia para vencer el insomnio
Aromaterapia para vencer el insomnio

La aromaterapia puede ayudarnos a conciliar el sueño y a que este sea de mejor calidad.

El sueño es importante para mantener el cuerpo y la mente adecuadamente descansados y despertarse con energía y buen humor.

Se calcula que entre un 25 y un 35% de la población adulta padece insomnio transitorio, y entre un 10 y un 15% presenta insomnio crónico. Se considera que una persona tiene insomnio cuando su sueño no es profundo y reparador y repercute en su vida diaria.

Sin embargo, este reto tan necesario para la salud,  el de dormir cada noche plácidamente, es imposible para muchas personas. Según un estudio reciente, el 10% de los adultos en los países occidentales usan somníferos para lograr conciliar el sueño y que este sea de calidad.

Los expertos advierten de que el uso de pastillas para dormir no siempre es efectivo y aconsejable y muchos de ellos aseguran que su utilización debería ser limitada.

El insomnio puede tratarse eficazmente sin necesidad de medicación. Existen soluciones más allá de las pastillas. A veces no nos damos cuenta de la cantidad de recursos naturales que tenemos a nuestro alcance, remedios naturales que nos  ayudan a contrarrestarlo y que han demostrado ser efectivos.

En nuestra anterior intervención os presentamos los beneficios que aportan las plantas en el dormitorio para mejorar el sueño. Hoy os vamos a hablar de otro remedio natural al alcance de todos, es la aromaterapia. No se trata de un invento nuevo, la aromaterapia es una disciplina milenaria basada en el uso de aceites esenciales de plantas aromáticas para lograr un equilibrio entre cuerpo y mente, es una de las mejores alternativas naturales y orgánicas para calmar la ansiedad y aliviar los trastornos del sueño.

Al sentido del olfato no se le presta la atención que merece y es el menos valorado de todos. Es el sentido que más conectado está con nuestros estados emocionales e influye notablemente en el comportamiento, tal vez en mayor medida que los otros sentidos porque estimula recuerdos y funciones del sistema nervioso autónomo.

El olfato puede percibir gran cantidad de olores que nosotros podemos aprovechar en beneficio de nuestra salud, en el caso que nos ocupa para mejorar el sueño.

Cuáles son estos aromas que pueden ayudarnos?

 

Algunas plantas tienen propiedades terapéuticas para tratamientos naturales

Hay diferentes tipos de aceites esenciales para dormir bien y luchar contra el insomnio:

El aroma de Lavanda es sin duda el más importante para conciliar el sueño, por sus propiedades relajantes, actúa como un regulador del Sistema Nervioso ayudando a vencer el insomnio.

El aceite esencial de naranja tiene también propiedades sedantes y relajantes, convirtiéndose también en un aliado en la lucha contra el insomnio.

El aceite esencial de albahaca es también considerado un buen aceite esencial para dormir. Se recomienda especialmente para las personas cuyo insomnio tiene un origen nervioso

También es recomendable el aroma de sándalo, sobre todo mediante incienso, si la causa de falta de sueño es debida a un fuerte estado de ansiedad. Encendiendo una varilla media hora antes de dormir se notará su efecto relajante y tranquilizador que inducirá al sueño.

El aroma del aceite esencial de manzanilla es uno de los olores para dormir profundamente y conciliar el sueño más rápido  ya que tiene propiedades desestresantes y calmantes.

Muchos otros aromas contribuyen al tratamiento del insomnio como el aceite esencial de salvia, el de valeriana, el de azahar, jazmín, rosas y de mejorana entre otros muchos.

¿Cómo usar los olores para beneficiarnos de sus propiedades para dormir mejor?

Existen distintas formas de obtener las ventajas de la aromaterapia. Ya que el mundo de los olores es muy subjetivo, debemos buscar las fragancias que más nos gusten y que consigan ayudarnos en cada ocasión.

 

Olores que benefician nuestra salud, en este caso el sueño
  • Las brumas de almohada están de moda, son aguas perfumadas con un suave y delicado aroma, creado especialmente para las almohadas, unas gotas de spray sobre la almohada antes de dormir impregnarán con su olor la superficie y hará las veces de un somnífero. En el mercado existen diversas opciones con mezclas de esencias y aceites que nos pueden ayudar  a convertir el sueño en un verdadero santuario de paz y armonía.  También podemos hacer nuestra propia esencia, existen numerosos tutoriales en internet que pueden ayudarnos a elaborarla.
  • Otra opción válida también es usarlo como ambientador impregnando el aire del cuarto con la fragancia que nos vaya bien y beneficiarnos de las propiedades del aroma toda la noche.
  • El uso de velas aromáticas e inciensos también nos aromatizaran el aire creando un ambiente adecuado de tranquilidad y relax propicio para el sueño.
  • Podemos beneficiarnos de las cualidades relajantes de los aceites esenciales también con un masaje o un baño aromático, diluyendo unas gotas de nuestro aceite esencial preferido en el agua tibia.

Seguramente nunca pensasteis que los olores pudieran suscitar dulces sueños. Ahora ya sabéis que nuestro subconsciente recibe con ellos una reconfortante señal y el cerebro se estimula positivamente preparándose para un dulce sueño.