La importancia del sueño en los niños

El niño crece mientras duerme
El niño crece mientras duerme

La importancia del sueño en los niños

La infancia es una etapa vital para el crecimiento, gran parte de este se produce durante las noches al ser el momento en el que se segrega la hormona del crecimiento (GH).

El volumen de hormona de el  crecimiento secretado durante un periodo de 24h es grande en los niños, alcanza cifras máximas durante la adolescencia, y después disminuye hasta sus valores más bajos durante la edad adulta.

La amplitud de los brotes de secreción es máxima por la noche, y el periodo más constante de secreción ocurre poco después del inicio del sueño profundo.

  • El sueño en los niños por tanto es fundamental ya que están en una etapa de crecimiento. Pero no sólo es importante por este motivo.
  • Mientras se duerme el cuerpo recupera energías y se enfrenta al nuevo día en mejor estado.
No dormir lo suficiente afecta al rendimiento escolar de los niños
No dormir lo suficiente afecta al rendimiento escolar de los niños
  • Dormir también es fundamental por los sueños. Mientras se sueña se procesan todos los acontecimientos del día, los niños asimilan y organizan lo visto y aprendido, maduran tanto física como psíquicamente e inician y ejercitan su independencia del mundo exterior y de sus padres….
  • El sueño en los niños influye en su rendimiento escolar  y es imprescindible para un bienestar psicológico. No dormir lo suficiente afecta a la memoria, creatividad y forma de enfrentarse el niño a las distintas situaciones diarias, esto influye en la relación del niño con el entorno. Al verse afectadas las habilidades sociales acabará teniendo problemas en su conducta o comportamiento, la autoestima de los pequeños puede verse afectada y se sentirán más tristes, de peor humor, irritables. Su bienestar psicológico se verá en peligro.
  • Es por esto que se debe de hacer todo lo posible por garantizar que el sueño en los niños cumpla con las horas recomendadas para su edad. A veces resulta complicado y ellos se muestran reticentes para irse a la cama, sobre todo en período estival con los días de largas horas de luz. Es importante desde temprana edad, establecer horarios, rutinas y tiempo de sueño regulares para los ellos, y ser firmes en su cumplimiento. Aunque a veces a los padres les resulte complicado por sus actividades, han de tener presente que el sueño en los niños es primordial para la salud, bienestar y éxito académico de sus hijos. Es equivalente a una buena alimentación, ejercicio, juegos y todas esas cosas que consideramos importantes inculcar en nuestros hijos. El sueño debe ser prioridad para toda la familia,  hay que poner al sueño al principio de esa lista de actividades y hacerles comprender a ellos lo importante que es el sueño para su correcto desarrollo.
El sueño es fundamentas en el niño para su correcto desarrollo físico y psicológico
El sueño es fundamentas en el niño para su correcto desarrollo físico y psicológico

Sin embargo el mayor problema de un sueño deficitario durante los 3 primeros años es que se ha demostrado  que ya no se puede recuperar. La evolución del niño se ve afectada durmiendo poco y aunque el sueño se normalice después, lo perdido por el camino, perdido queda y las posibilidades de que el niño sufra problemas de sueño el resto de su vida aumentan.

Según el doctor Diego García Borreguero, director del Instituto de Investigaciones del Sueñoel 60% de los niños en España no duerme las diez horas que se recomienda. Este doctor ha señalado la importancia que tiene que los niños se acuesten a una hora razonable para que su organismo pueda descansar lo suficiente. En España parece ser que la hora de acostar a los niños se ha retrasado una media de 30 minutos y esto afecta al sueño en los niños.

Por otra parte La Fundación del sueño de Estados Unidos establece que, durante su primer año de vida, los bebés necesitan dormir entre 12 y 18 horas diarias. Entre el año y los tres de edad, el tiempo de sueño recomendable es de 12 a 14 horas. Una hora de sueño menos (entre 11 y 13) es lo indicado para los niños de entre tres y cinco años, mientras que entre los cinco y los diez años, el lapso de sueño infantil se reduce a unas 10 u 11 horas. Para los adolescentes, es de unas nueve horas diarias y, para los adultos, cerca de ocho.

Con todo lo expuesto sólo queda relacionar el buen descanso con el colchón. Es responsabilidad de los padres garantizar los medios adecuados para el buen desarrollo de los hijos. Nuestros hijos van a pasar muchas horas creciendo en el colchón y este tiene que reunir unas características idóneas para que su columna adquiera la posición correcta y se desarrolle de forma adecuada para evitar dolencias futuras, así mismo el conseguir un descanso de calidad  va a estar muy relacionada con el colchón que hayamos elegido para él.

Para estas edades se recomiendan una superficie de descanso firme y adaptable, higiénico y duradero.

  • Firme y adaptable ya que es importante que mientras duerme el niño tenga la espalda lo más recta posible, hay que descartar colchones demasiado blandos o envolventes. Pero también hay que buscar el confort del pequeño y por eso recomendamos un colchón adaptable.
  • Higiénica, porque cada día es más habitual que los pequeños sean alérgicos a los ácaros.
  • Duradero, pues sencillamente porque son niños.

Por todo ello desde ColchonVip hemos pensado en esta gente menuda, que serán los adultos del futuro y tenemos colchones de cuna y juveniles diseñados específicamente para el mejor confort y salud de los pequeños.

Como siempre os decimos, os ayudaremos en la elección adecuada para cada uno.