Cómo recuperar tu rutina de sueño después de vacaciones

Durante este mes de septiembre muchos nos enfrentamos a la vuelta a la rutina. Después de un período de vacaciones en el que nos olvidamos del despertador, nos acostamos tarde y nos levantamos cuando nos apetece, echamos alguna siesta… es normal que nos cueste volver a retomar nuestros horarios habituales. Si no quieres que esta situación se convierta en un drama, ¡apunta estos consejos!

Tómatelo con calma

No te angusties si ves que te cuesta conciliar el sueño al principio. Asume que es muy probable tener algunas dificultades las primeras noches tras volver al trabajo; de esta forma tardarás menos tiempo en recuperar la normalidad en tu descanso porque no alimentarás a tu insomnio con estas preocupaciones.

Adáptate gradualmente

Si te pasaste las vacaciones acostándote y levantándote tarde, el día que tengas que volver a madrugar te va a ser imposible pegar ojo y te morirás de sueño por la mañana. Es difícil, lo sabemos, pero si empiezas a adaptar tus horarios de sueño progresivamente varios días antes de acabar tus vacaciones, te ahorrarás muchos desvelos. Ve moviendo gradualmente las horas a las que te acuestas y levantas hasta que ya no te cueste nada hacerlo.

También es importante que también adaptes el resto de horarios de tu día a día: los de las comidas, los de hacer deporte, los de ocio, etc.

Prepara tu dormitorio

Tu dormitorio también puede ayudarte a conciliar el sueño más rápido durante estos días de cambio.

Lo primero es sin duda contar con un buen equipo de descanso, lo que incluye tanto al colchón como a la base de cama o canapé y las almohadas. En ColchonVip® tenemos todo tipo de productos al mejor precio, y también packs especiales para que los compres en conjunto y ahorres todavía más. Otros aspectos importantes son la iluminación, que debe ser cálida, suave y baja, y una correcta ventilación del cuarto.

Actívate por la mañana

Los primeros días te va a ser más difícil salir de la cama y sentirte realmente despierto. No retrases la alarma, intenta recibir luz en cuanto te despiertes, date una ducha o practica algo de deporte, aunque solo sean unos estiramientos. Esto te va a ayudar a activarte más rápido y a no sentir que te duermes constantemente durante las primeras horas de tu día.

Guía para elegir la almohada ideal

Cuando estamos buscando un nuevo equipo de descanso, todas las atenciones suelen ir para el colchón. Sin embargo, la almohada también es un elemento muy importante para conseguir un sueño de calidad, por eso es esencial conocer las claves para elegir la que mejor nos vaya. ¡Descúbrelas a continuación!

Beneficios de acertar con tu almohada

La almohada tiene implicaciones positivas en tu descanso y salud, por eso es importante elegir la adecuada. Algunos de sus beneficios son:

  • Alinea correctamente tu espalda
  • Previene dolores de espalda y cervicales, evitando lesiones
  • Alivia la presión en la zona de cabeza, cuello y hombros.
  • Mejora la calidad de tu descanso.

La almohada según su material

Una de las primeras decisiones al elegir almohada es decidir de qué material queremos que esté hecha. A nivel general, nos encontramos que estos productos pueden ser de 3 tipos, cada uno con sus propias ventajas: almohadas de fibra, almohadas viscoelásticas y almohadas de látex.

Almohadas de fibra: están rellenas de fibra de poliéster y son muy transpirables y ligeras. Su precio accesible y su sencillo mantenimiento (se pueden lavar fácilmente) las hace muy populares. ¿Un ejemplo? La Almohada Noah Fibra de Pikolin.

Almohadas viscoelásticas: fabricadas en viscoelástica, destacan por su gran adaptabilidad (reaccionan al peso y calor, adaptándose a la persona), su capacidad de recuperación y el alivio de los puntos de presión. La Almohada Visco Top De Pikolin está en esta categoría.

Almohadas de látex: fabricadas en látex natural, sintético o una mezcla de ambos, son conocidas por su resistencia, flexibilidad y transpiración, además de por ser especialmente higiénicas e hipoalergénicas. La Almohada Látex Triplex De Pardo está fabricada en este material.

Altura y firmeza de la almohada según tu postura al dormir

Según cómo duermas, te irán mejor unas almohadas que otras:

  • Si duermes boca arriba, te recomendamos una almohada de altura y firmeza medias, ya que en estos casos se necesita que la cabeza quede un poco alzada para alinearse adecuadamente con la columna.
  • Si duermes boca abajo, las almohadas de baja altura y más bien suaves serán la mejor opción para no añadir más presión en la zona del cuello.
  • Si duermes de lado, una altura y firmeza altas suelen ser la mejor opción. De todos modos, lo mejor es que tengas en cuenta qué espacio queda entre tu hombro y la base de tu cuello para escoger la almohada que mejor encaje en ese hueco sin tener que forzar la postura.

Estas son algunos de los factores que deberías tener en cuenta a la hora de elegir tu nueva almohada. Si aun así tienes dudas, o si tienes alguna circunstancia especial a tener en cuenta (lesiones cervicales, complexión más grande…), en ColchonVip® estaremos encantados de asesorarte para que aciertes al 100% con tu almohada. ¡Tenemos productos de las mejores marcas a precios increíbles!

La Luna Azul

Los fenómenos astronómicos son espectáculos que la naturaleza nos regala. El mes de agosto ha llegado plagado de estos fenómenos. Hace unos días observábamos el carrusel de estrellas fugaces, popularmente conocido como perseidas y lágrimas de San Lorenzo. Este domingo 22 de Agosto de 2021

La Luna Azul será la protagonista de los cielos.

Las vacaciones de verano y los desplazamientos lejos de las grandes ciudades hacia lugares donde la contaminación lumínica es menor, invitan a observar la conocida y popular Luna Azul.

Normalmente los meses tienen solamente una luna llena, pero ocasionalmente se cuela una segunda. Las lunas llenas están separadas por 29 días, mientras que la mayoría de los meses tienen 30 ó 31 días de duración; asique es posible ver dos lunas llenas en mismo mes. Este fenómeno puede darse cada dos años y medio, cuando se observan cuatro lunas llenas en la misma estación del año.

Se denomina Luna Azul a esta coincidencia de dos plenilunios en el mismo mes o cuando una misma estación ve cuatro lunas llenas, según informa la NASA.

Sin embargo, la Luna Azul no es azul realmente. Anteriormente la NASA dio una explicación al respecto concretando que no es que se cambie de color, sino que se ve gris pálido y blanco, aclarando además que el hecho de que coincidan dos lunas llenas en un mismo mes no tiene ninguna influencia en el satélite, lo que quiere decir que no cambian las propiedades de la luna.

Pero la Luna Azul lo que si es especial, porque se trata de una luna “extra” en una estación que normalmente tendría 4 lunas llenas. Supone la oportunidad de contemplar dos lunas llenas en un mes.

Aunque el 100% de superficie iluminada se completará el domingo a las 14:02, la luna se mostrará plena durante todo el fin de semana, desde el viernes por la noche hasta el lunes por la mañana. Por lo que disponemos de tres días para contemplar y admirar este fenómeno que no se repetirá hasta dentro de dos años y medio.

Cualquier punto con buena panorámica de la bóveda celeste es bueno para observar la Luna Azul.

GATOS. ¿Tiene riesgos dormir con ellos?



  • Quienes tienen por mascota un gato les encanta pasar parte de su tiempo libre en casa junto a su felino, es por eso que muchos deciden darle pie al gato para que duerma junto a ellos y en la misma cama, y muchos aseguran que esta costumbre es la que más les gusta de su gato. Según estudios publicados, dos tercios de las personas que viven con gatos duermen con ellos. Hay que reconocer que dormir con una criatura pequeña, peluda, suave, que ronronea en la oscuridad tiene mucho encanto.
  • Una dulce costumbre con numerosas ventajas emocionales, pero que también puede comportar algún que otro riesgo.

Si te preguntas si es malo entonces dormir con el gato, la respuesta  depende de varios factores, pero lo cierto es que los expertos recomiendan que los gatos cuenten con su propio espacio para dormir. Son animales que destacan por ser dormilones, sobre todo cuando son adultos, pudiendo pasar hasta 16 horas durmiendo. Razón más que suficiente para que pensemos en proporcionarle un lugar adecuado para poder dormir. Los gatos son animales territoriales, ellos entienden como su territorio aquel lugar en el que encuentran los recursos para satisfacer sus necesidades básicas y expresarse como gato. Y entienden que su territorio es suyo, su propiedad privada. No le prives de su sitio favorito de la casa, si ese sitio es tu cama para dormir, siempre querrán hacerlo ahí, esto debemos tenerlo claro desde el momento que entra a formar parte del hogar. Si un día le permites dormir en tu cama, las posibilidades de exigir este lugar cómodo y cálido para dormir serán altas.

Entre los inconvenientes que aporta el hábito  de dormir con un felino tenemos las siguientes:

  • Si tienes algún tipo de alergia, asma o problemas respiratorios, debes saber que los alérgenos se quedan en el colchón cuando tu gato duerme allí, aunque cambies las sábanas. No sólo supone un problema la cantidad de pelo que sueltan, también la saliva y otros fluidos con los que pueden manchar el colchón durante las horas de sueño. Si eres alérgico dormir con gatos solo te provocará un aumento de los síntomas de alergia ya que estarás mucho más expuesto y durante más tiempo.
  • Si te cuesta conciliar el sueño, los gatos no son los mejores compañeros. Los gatos tienen diferentes ciclos de sueño a los nuestros y además son animales nocturnos, por lo que les gusta comer, pasearse, hacer ruidos y también jugar por la noche. Estos hábitos pueden influir en la calidad de tu descanso y en tu patrón de sueño.
  • Si eres una persona que se mueve mucho durmiendo, eres sonámbulo o padeces terrores nocturnos, quizás debes plantearte dormir con tu gato. Ante movimientos bruscos, el animal está alerta y quizá, a modo de defenderse de una amenaza, puede arañarte, clavar sus uñas o darte un mordisquito si lo asustas o sorprendes en la noche.



Entre los beneficios que nos aporta tenemos:

  • Grandes beneficios emocionales. Dormir en su compañía nos aporta mayor sensación de seguridad emocional y física para ambos y ayuda a reducir el estrés y la ansiedad.
  • Dormir acompañado de tu gato es un momento especial en el que ambos estrecháis lazos de afecto. Es una forma fabulosa de acercarse al animal, ya que tiende a ser de carácter independiente y solitario.
  • Ayuda contras el insomnio: Puede ser un remedio natural para combatir el insomnio. Los expertos aseguran que el ronroneo de los gatitos genera vibraciones que tienen un efecto muy positivo en el sueño de las personas. Además estas vibraciones ayudan en el alivio de dolores musculares, articulares, huesos y tendones.
  • Podrás tener un masaje gratuito: Esa costumbre que tienen de amasar con sus patitas adquirida del amasamiento que hacen los gatos sobre las mamas de sus madres, cuando son cachorros, para estimular la secreción de leche mamaria, al hacerlo con los humanos recrean ese momento que se sienten reconfortados y felices y desean expresar cariño.
  • La calidez que generan: con tu gato cerca, sobre todo cuando las temperaturas son bajas, se genera una experiencia acogedora. El gato se beneficia del contacto con tu cuerpo y de la ropa de abrigo y tú de la calidez de su pelo.


Si valorando las ventajas y los inconvenientes sigues queriendo dormir con tu gato, debes tenerlo bajo vigilancia del veterinario y tomar las precauciones necesarias para evitar que esta costumbre tan adorable acabe originando problemas desagradables.

EL SUEÑO EN EL VERANO

El sueño en el verano

Como dice el refranero español, que a mí me gusta y lo considero muy sabio: “Junio lluvioso, será un verano caluroso”. Y eso es lo que se pronostica para este verano y se cumplirá el sinónimo de verano y buen tiempo, también vacaciones, sol y, en definitiva, alegría. La llegada de los meses de calor se relaciona directamente con el buen humor y la felicidad. Sin embargo, las altas temperaturas no van siempre de la mano con un estado de ánimo positivo, sino en ocasiones puede ocurrir todo lo contrario. Según los expertos, los picos de calor que sufrimos en el período estival pueden provocar cambios de humor que afectan a nuestra irritabilidad y generar apatía, cansancio e incluso tristeza. Y es que es muy habitual en verano dar vueltas y vueltas en la cama durante la noche sin poder pegar ojo, y el resto del día sufrir las consecuencias de ello.

Tras ese mal sueño de las noches de verano y la “pesadez” del día se esconden decenas de procesos químicos y biológicos que ocurren en el interior de nuestro cuerpo.

¿Qué nos sucede las noches de verano?

Verano y sueño es el eterno problema. Las altas temperaturas suelen provocar la falta de sueño. Sin embargo los expertos aseguran que la fatiga por sueño se puede evitar teniendo una buena higiene en el sueño. Es indiscutible que las noches calurosas de verano, los malos hábitos que se instalan en el día a día. En verano los horarios se descontrolan. Comemos a distintas horas, alargamos las tardes-noche en las terrazas y tratamos de aplacar el calor con bebidas (alcohol o refrescos con cafeína) que no favorecen nada a un correcto descanso. Todo esto desregula nuestros biorritmos habituales y nos complica el sueño y aumenta los problemas para dormir. Es por ello que se recomienda tener presente las normas de higiene del sueño válidas para cualquier época del año.

El sueño está directamente relacionado con la secreción de una hormona denominada melatonina que se segrega durante la noche. Al haber más horas de luz, la melatonina que producimos disminuye y es más difícil conciliar el sueño. También influye la temperatura: a más temperatura corporal menos producción de melatonina. Cuanto más baja una, más se produce la otra.

Durante los meses de verano, las altas temperaturas son una de las principales causas de insomnio. De hecho la calidad del sueño disminuye a partir de los 26 grados.

¿Cómo funciona la temperatura corporal durante el sueño?

La temperatura corporal depende del ritmo del ciclo de sueño-vigilia, la cual disminuye al dormir por la noche y aumenta durante el día.

Es más probable conciliar el sueño cuando la temperatura corporal disminuye, y es poco probable lograrlo cuando aumenta. Además después de conciliar el sueño, la temperatura corporal disminuye aún más. Sin embargo cuando las temperaturas nocturnas son elevadas, la pérdida de este calor interno se ve dificultada y en consecuencia también lo hace el sueño.

En resumen, si se duerme mal hay que tener en cuenta el ambiente térmico y hacer los cambios necesarios para descansar mejor.

La exposición a temperaturas más elevadas durante la noche puede ser especialmente perjudicial para las personas de elevada edad. Estos suelen despertarse fácilmente, incluso con exposiciones leves al calor y cuentan además con una tolerancia al calor ya reducida.

Está demostrado que las altas temperaturas afectan a múltiples aspectos del sueño, dando lugar a los siguientes padecimientos:

  • Peor duración del sueño
  • Sueño poco profundo
  • Menor tranquilidad para dormir
  • Dificultad para conciliar el sueño
  • Menor satisfacción del sueño.

La Fundación Nacional del sueño sugiere que la temperatura ideal para la habitación oscila entre los 15,5 ºC y los 21 ºC.

Es necesario evitar las temperaturas extremas, ya que esto podría activar los mecanismos de defensa reguladores que lo despiertan por la noche.

En otro artículo de nuestro Blog, os damos unos consejos para ayudaros a bajar la temperatura del dormitorio, la cama y también del durmiente.

Tener presente también que un buen conjunto de descanso con buena ventilación es determinante para encontrar la temperatura perfecta para el descanso.

Siguiendo estas indicaciones podemos conseguir un mejor descanso durante el verano y así mantener nuestro cuerpo saludable